Un lugar "tranquilo" para leer (Priv. Nero)

Casí siempre me la pasó en el bosqué, ¿Y aún así decía que era del reino de corazón? Extraño, pero en fin, el bosqué me calmaba más, y no por su tranquilidad, ya que realmente no es tan tranquilo como parece, sino que era un buen lugar cuando quería estar solo. Aunque tanta soledad aburré, pero aún no tenía ganas de regresar al reino. Tanto vagar, comenzaba a darme sueño.

No encontré mejor lugar que un frondoso y gran arból, sus grandes ramas provocaban ventiscas relajantes de más, bueno no esperé más, me acerqué al arból, y terminé recostandomé en él, quedando profudamente dormido después de un rato. Pasaron, quizás unos 30 minutos, en ese tiempo ni me importaba lo que sea que puede suceder al mi rededor, no obstante escuché la voz de alguien, como si estuviera del otro lado del arból, más no me importo, solo seguía durmiendo.

El día estaba realmente cómodo, no habia mucho sol, un frondoso arból permitía que más brisa en esta zona brotarán, había suma tranquilidad, sinceramente cualquiera se quedaría dormido aqui sin ningún remedio. Una de mis canidas orejas se movía levemente, era un reflejo, se supone que estaba soñando, al igual que mi cola que debes en cuando se movía por auto reflejo. ¿Qué era lo que estaba soñando? Ni idea, sabía que estaba soñando, más lo único que podía reconocer de ese sueño era el castillo real de corazón, tal vez solamente es un mal recuerdo.

Y como si fuera poco, en el mismo sueño alguien me estaba jalando de la oreja, pero no era nadie a quien yo conocía, era más bien otra persona, a la que no lograba ver el rostro, genial ahora sueño con cosas más raras, y con la sombra de alguien jalando mi oreja.

Lentamente abrí un ojo, como siempre, al principio se ve todo borroso, cuando la vista comenzó a difuminarse, veía el brazo de alguien tocando mi oreja sin mi permiso, lentamente tomé el brazo de aquella persona y lo jalé para que quitara su mano de donde estaba, alcé la cabeza para ver quien me "tocaba". Era un niño, de ojos verdes y cabello negro, pero lo más raro es que era un niño, ¿Que hacía un niño en los peligrosos bosqués?.

-No vuelvas a hacer eso -Murmuré, mirandolo con la típica cara de mal carácter que siempre tengo.

Cabellos negros, ojos verdes, bajito, debíl y por lo visto inocente, tenía un niño frente a mí, en serio que los humanos, no importa su edad, adoran el peligro, y aún más al acercarse así a una persona -O raza- desconocida por ellos mismo. Al instante esté salto hacia atrás con miedo, típico, aún no soltaba sus brazos, pero viendo que estó no ayudaba se lo solté sin más.

Nerviosamente comenzó a hablarme, tartamudeando en cada palabra que salia de su boca, en parte me hacía pensar de que tal vez era lento al hablar, pero todo era producido por su miedo. Gateando, se dispusó a buscar algo, un libro, y se sentó a mi lado, increíble, por unos momentos me tenía miedo y ahora me estaba sonriendo.

-¿Albus? -Repetí algo confundido y medio adormilado, al instante que estiraba mis brazos -Soy Nero -Contesté en un bostezo, frotandome los ojos con una mano- ¿A que se debe a que me despertarás?

Realmente estaba a que me volvía a hechar a dormir, pero con esté niño al lado creo que mejor será estar atento a todo lo que podría ocurrirle, o lo que sea que quiera preguntarme. Entrelacé mis dedos entre ellos y comencé a estirar los brazos, haciendo que los huesos de mis dedos suenen, me interesaba poco si este sonido no le gustaba o nó, que mejor se lo aguanté, tenía que quitarme el sueño de encima. Lo volví a ver, ¿Que sí eran reales qué? ¡Ah ya! Mis orejas y cola, ya que esté lo veía con detenimiento y tal vez...¿Fascinación?.

-Son reales -Yo mismo me toqué una para que viera- Al igual que mi cola, soy semi-humano por si no lo has notado.

Lo lamentaba, ¡Vamos! No era para tanto, aunque si me hayá molestado que me hayá despertado tampoco era para ponerse así, llevé mi mano a su azabache cabellera y comencé a revolverselá, como señal de que no importará.

-Neh, no te preocupes, solamente no vuelvas a tocarme las orejas sin mi permiso -Mencionaba ese hecho, y ahora que lo volvía a pensar....-¿que hace un niño como tú en los bosqués?

Off: Tranqui~~ Yo me mató creyendo que mis roles son chafas ;w;U

Había dejado de revolver su cabello para escuchar lo que tenía que decirme, internamente me seguía preguntando que hacía un niño en los peligrosos bosqués, tal vez no era un niño del todo, como la gran mayoría, podría tener quizas algunas habilidades que le ayudarán en cuestion de segundos cuando había peligro, ¡Pero por dios, era un niño! Se veía frágil, eso podría llamar la atención de cualquiera, de una forma lasciva o nó.

¿Libro de terror? Me impresionaba que alguien como él le gustará ese tipo de cosas, por lo menos era valiente, un ventaja. Miraba con curiosidad ese grueso libro que traía, acomodandome mejor a las raices del árbol, debía ser un gran lector para traerse consigo un libro de tan gran magnitud y leerlo completamente.

-¿Yo? Pués, es más tranquilo y relajante que la ciudad -Mucho más relajante que el bullicio que provocaban los humanos haciendo quien sabe qué- Los bosqués son peligrosos, esta lleno de criaturas malignas y animales salvajes.

Off: God, perdon si quedo algo fail el post