Salvajes... Complacen mi Corazón.

Era común para Aisu encontrarse a si mismo vagando sin ton ni son por los bosques de Wonderland, ya que bastaba con que se distrajera para que olvidara le motivo por el cual estaba allí o hacia donde se dirigía inicialmente, peor aquello no era nada que le asustara o preocupara, en cambio le resultaba emociónate ya que así siempre tenia cosas nuevas por descubrí o ver, aunque fuera probable que ya las hubiera descubierto o visto antes.

Sin mucho por hacer y caminado sin dirección aparente se vio a si mismo cerca del lago, y aunque había una considerable cantidad de niebla, esto no suponía ningún reto para sus agudos sentidos animales.

-hoy quiero comer un regordete pescado…-

Se dijo a si mismo alegre, ya saboreándose la comida para así correr hacia la orilla del algo, más que dispuesto a tirarse para pescar, literalmente, su comida con las manos peor a medio camino sintió el aroma de alguien desconocido, deteniendo su marcha, haciéndose invisible por instinto, sonriendo pícaro ante la presencia alguien.

Definitivamente era una persona, y las personas siempre llevaban cosas bonitas y brillantes!! Esa simple idea le emociono bastante buscando con cuidado el origen de la esencia ajena hasta que finalmente pudo distinguir el cuerpo ajeno no muy lejos de allí.

¿Que hago? el no mira… eso es presa fácil pero… debo tener cuidado para que no me atrape ¿verdad? Entornes como? Mmm ¡¡ya se!!

Tras aquel debate interno se tiro cuerpo a tierra, aun invisible para acercarse a aquella persona lentamente, deteniéndose ante el más mínimo movimiento de su futura presa, después de todo solo cuando estaba quieto era completamente invisible, de lo contrario en movimiento uno podía ver una figura distorsionada semi-invisible moverse por allí.

¡¡No tiene brillantes!!

Se quejo molesto al tener a aquella persona al alcance y no ver nada llamativo, pero debía tener, sus ropas estaban muy limpias o olía demasiado bien como para no tener cosas bonitas, así que con aquello en mente se acerco más estirando una de sus manos para revisar con cuidado los bolsillos ajenos, o al menos donde se supone que normalmente hay bolsillos.

No lo esperaba, se suponía que aquello iba a ser algo sencillo, le quitaba todo lo lindo y brillante para desaparecer antes de que su "victima" se diera cuenta, luego podría encontrar un buen lugar para poner esas cosas bonitas en su madriguera pero aquello no pasaría, no solo se encontraba así mismo atrapado sino que en pánico por al inesperada situación.

Movía su cola de forma nerviosa, todo su cuerpo delataba cuan asustado y en pánico estaba, completamente congelado pro la situación, mirando nervioso hacia todas partes, incluso intentando hacerse invisible peor no ayudaba nada en ese momento.

-e..eso es me..mentira!! yo...yo te vi... nu... nunca te moviste!!...-

Exclamo en un leve puchero, olvidándose completamente de la potencialmente peligrosa situación en la que estaba; dándole una mirada desaprobatoria ante su actitud, sin hacer nada para que suelte su manita aun.

-esta mal mentir!!-

Le regaño mirándole severamente, era un extraño cambio de papeles por así decirlo, pero se notaba en su actitud y acciones que no fingía o actuaba, lo estaba diciendo de verdad, pese a ser quien hace segundos atrás intento robar.

-y ¿por qué te vistes como chico? porque eres una chica no? hueles lindo como para ser un chico... bueno algunos chicos también huelen lindo pero lindo de otra forma...-

Comento luego, soltándose de su agarre para cruzarse de brazos, mirándole aun con severidad, cual padre que acaba de encontrar a su hijo o hija haciendo algo malo.

Golpeteaba con su patita derecha, aun cruzado de brazos, viéndola enojado en aquella actitud desaprobatoria y severa ante la mentira ajena, sin lugar a dudas Aisu era inquebrantable al momento de regañar a otros para que dejen de hacer cosas malas, siendo que al escuchar su explicación ladeo el rostro con una expresión confundida , quedándose en silencio y pensativo unos largos segundos.

-oh... ahhhhh... -

Exclamo siendo que, de existir una representación fiel de Arquímedes en su momento de hacer su famoso descubrimiento y consiguiente exclamación de "Eureka"; sin lugar a dudas Aisu se llevaba todos los honores.

Por otro lado sus ojos se abrieron grandes como platos al escuchar su explicación del porque, se vestía como hombre, era un shock para Aisu, el que ella tuviera que vivir esa vida tan peligrosa, aparentemente sola...

Eso esta mal... nadie debería vivir así... es malo... y... y triste...

Pensó mientras sus labios formaron un pequeño puchero y sus ojos se tornaron vidriosos, incluso una que otra lagrima comenzó a brotar de estos; obviamente había dejado de oírla tras escuchar el porque usaba ropas de hombre; así sin pensarlo 2 veces prácticamente la tecleo en un fuerte abraso, derramando lagrimas de empatía por su triste y peligrosa vida.

-e sniff ...esta bien sniff... esta binen yo sniff... yo te protegeré sniff ...nadie te hará cosas malas, lo primero sniff...-

Dijo esforzándome lo más que pudo por contener las lagrimas mientras la abrazaba fuertemente, tratando de consolarla por su dura y peligrosa vida, ademas de que Aisu se sentía culpable ya que su vida era tranquila y sin muchos peligros y ahora se enteraba que en wonderland había muchachas que debían fingir ser hombres o les harían cosas horribles solo pro ser mujeres; su llanto solo aumento,

-es sniff... esta bien sniff... yo sniff... yo te llevare a mi casa y sniff... y te daré lindos vestidos sniff... y snif... y podrás ser una chica de nuevo...-

Dijo tomándola de los hombros y viéndole a los ojos, más que decidido en ayudarla a que olvidara aquella horrible vida que vivió. Así secándose las lagrimas con resolución tomo la mano ajena tirando de esta.

-ya veras... tengo muchos vestidos lindos te gustaran!!-