Alice in Wonderland
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Últimos temas
» ¿Con qué esas tenemos? [Priv/Nero]
¡Que comience la función! EmptyMar Ago 04, 2015 3:00 am por Nero

» Una Gran Fiesta! || Priv Emily Dawson
¡Que comience la función! EmptyJue Jul 23, 2015 8:27 pm por Aloshka Bell

» Trabajos Forzados?? [Priv. Emily Dawson]
¡Que comience la función! EmptyJue Jul 23, 2015 8:15 pm por Aloshka Bell

» Inocente Calma. {Priv. Yoru~}
¡Que comience la función! EmptyMar Jun 23, 2015 5:18 pm por Yoru

» { P } Sangre rojo caramelo
¡Que comience la función! EmptyVie Mayo 22, 2015 3:32 am por Sora

» ¿Enfermera?
¡Que comience la función! EmptyDom Mayo 17, 2015 8:45 pm por Aloshka Bell

» ¡Reunión para conocernos!~
¡Que comience la función! EmptyMar Mayo 05, 2015 6:42 pm por Richter

» Registro de Familia real
¡Que comience la función! EmptyDom Mayo 03, 2015 9:08 pm por Nero

» Registro de Fisicos
¡Que comience la función! EmptyDom Mayo 03, 2015 9:06 pm por Nero

Hermanos y Elite
Dioses e Imperio Romano +18<

¡Que comience la función!

Ir abajo

¡Que comience la función! Empty ¡Que comience la función!

Mensaje por Roxas Mar Abr 23, 2013 3:20 pm

Pasear por las calles como acostumbraba se hacía una rutina aburrida, pensaba demasiado como para creer que en cualquier momento algún monstruo o algo saldría de los arbustos y ¡BAM! Una pelea salvaje ha aparecido. Aun así iba por las calles de la Ciudad Blanca, lo bueno de traer sus típicas tandas para pasear –camisa negra, chaqueta de blancos, rojos y negros, pantalones de cuero con algunos retazos e plateado, zapatos entre negros y rojos y una muñequera de blanco y negro con otros pocos adornos por ahí– es que le veían como un chico mas, no como un caballero. Roxas, el niño sin título. Le sonaba bien. Curiosamente, se había comprado una bolsa bastante grande de dulces que podría atraer a cualquier chiquillo de 5 al instante, como si fuera el atún para los gatos sonrientes o el té de un sombrerero. Llevándose una paleta a la boca, fue bien recibido en algunas otras localidades donde solo era llevado como otro cliente, uno extraño, porque era de las pocas veces que le veían en la Ciudad Blanca, pero es porque no le daba tiempo u olvidaba el lugar favorito donde hacía buenas compras, no es que le molestase en el Reino de Corazones, sino que aquí la gente era mucho más civilizada.

¡Bueeeeeeeeeeeeeenos días joven! – Le grito un hombre a su lado, bajito y con un traje de bufón, haciendo que el chico se exaltara y casi se le fuera el corazón por la garganta – ¡No se asuste, que yo no muerdo! – Río a carcajadas, casi como un loco… Quizás se llevaba muy a pecho su papel
N-No me ha asustado, e-es solo que me tomo por sorpresa – Respondió, acomodándose la chaqueta
¡Mejor! ¡Así no tendremos que llevarnos un cadáver por muerte asustadiza! – Dijo una vez más al lanzar un chiste malo, cosa que solo logro una mueca de poco entendimiento de parte del rubio y el hombre solo se encogió de hombros
¿Por qué carga esas pintas? – Preguntó, intentando cambiar un poco de tema
¡Gracias por acordarme, joven…!
Roxas – Respondió, intentando aguantarse una reverencia
¡Joven Roxas! Extraño nombre, ¡Pero al menos es un poco menos extraño que Quevedo, ¡Bufón del pueblo! – Se rió a carcajadas nuevamente, poniendo ambas manos sobre su estomago – Bueno, realmente no soy un bufón, aquí entre nos – Le susurra al muchacho, acercándose con su pequeño cuerpo hasta él haciendo que el rubio bajara levemente la mirada
¿Ah no?
No, solo es mi actuación para la preparación de los títeres pedidos por la Sra. Blanca – Siguió con unas leves carcajadas, alejándose del muchacho para gritar y saltar otra vez – ¡Vengan todos, es hora de hacerle un pequeño regalo a los más pequeños!
Ah pues… ¿Y en que me involu-…? – No le dio más tiempo de hablar, porque “Quevedo” le había tomado de la mano bruscamente y le tiro hasta el centro de la Ciudad, donde estaba una especie de carpa y unos cuantos pequeños en frente esperando, sonrientes.

Aunque no fue invitado para ayudar con los títeres, parece que el bufón solo quería un poco de cuidado a la carpa porque siempre habían pequeños que se acercaban para tomar sus marionetas y arrancárselas de la mano, eso, o darle la bienvenida al pueblo con ese pequeño espectáculo. Se puso a un lado de pie, cruzado de brazos y mirando con el ceño levemente fruncido. No es que no le gustasen, sino porque era una especie de tic que hacía cuando estaba muy quieto. Algunos niños intercambiaron miradas con él, haciéndole dibujar una sonrisa a medio lado cada vez que ellos lo hacían de oreja a oreja, esperando impacientes a que el espectáculo fuese a empezar.

Roxas
Roxas
Soldado Corazones
Soldado Corazones

Raza : Humano

Mensajes : 29
Fecha de inscripción : 11/02/2013

Volver arriba Ir abajo

Volver arriba


 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.