¡Read this shit! (?)

Era un día no normal como cualquier otro día de Wonderland. Los pájaros de pan tostados con mantequilla revoloteaban cantando las mañanitas como siempre.

Cierto rubio soldado de verde, bostezaba aburrido, el día de hoy le tocaba hacer las compras en la ciudad neutral ya que misteriosamente todos los dulces de su casa habían “desaparecidos”.

-Debo esconder mejor los caramelos de ese monstruo –Claro el realmente no consideraba a su gemelo como un monstruo, al menos no conscientemente.

-¡Roooooooooooooxas~~! –Aquella voz lo hizo voltearse y justamente caer al suelo con un peso mayor encima.

Parpadeó varias veces sin podérselo imaginar, el can albino estaba encima de él con una sonrisa de par en par muy energéticamente y agitando la cola como desesperado. Lo que más le confundía no era esa sonrisa, que en parte le incomodaba, o que casi se estuviera babeando, casi, sino un simple y vago hecho:
Que estaba encima de él.

-¿Ne-Ne.. –No logró terminar la frase cuando sutilmente apareció el castaño y jaló al can de la gorra del chaleco, esté literalmente calló patas arriba en el suelo.

-¡Idiota! No hagas eso –El castaño golpeo al albino justo en la cabeza.

-¡Auch~~! –Masculló el can llevándose ambas manos encima de esta.

La mente de Roxas trataba de procesar todo lo que ocurrió –Aun tirado en el suelo- Nero, el chico duro y de mal carácter con quien casi siempre discute comportándose muy infantil y alegre, y Sora, su hermano gemelo quien siempre era endemoniadamente feliz comportándose de manera hostil y golpeando a alguien.

Muy raro.

-¿S-Sora? –Miró al castaño buscando la explicación, el otro simplemente rodó los ojos y bufó.

-No imbécil soy Nero -¿Escuchó bien acaso? Luego vio que el castaño apunto con el dedo pulgar al canido- Este es Sora

-Hola Roxy~~ –Y saludó con la mano como si nada pasará.

-¿Qué QUÉ? –Se levantó apresuradamente tomando a Sora (Nero) de los hombros, zarandeándolo un poco- ¡Dime que solo es una broma de mal gusto!

El castaño le dio un leve golpe en la frente usando solamente sus dedos índice y medio siniestro para alejarlo de él. Roxas llevó su mano a su frente consternado, solamente había alguien que le hacía eso.
Y ese alguien estaba aun sentado en el piso meneando la cola de un lado a otro.

-¿Me estoy volviendo más loco o es un ridículo sueño?

-Tonto, cambiamos de cuerpo –Suspiro- Es que él sombrerero nos hizo probar un nuevo té del yo-no-se-qué, una cosa que acaba de inventar y… ¡Sora deja en paz mi cola!

-P-Pero, es suave y esponjosa~~ –Seguía agarrando la cola, abrazándola y restregando su mejilla contra la cola- Y blanquita, y afelpada, y limpia y…

Todo aquello sonaba raro para los oídos del rubio, y más aun viniendo de los labios y con el tono de voz del albino.

-Roxas –Se torna serio y se levanta quedando frente a Roxas, el otro estaba atento a ver qué sucedía, cuando Nero (Sora) tomó al rubio por debajo de los hombros y lo alzo en el aire- ¡Mira! Ahora soy más alto que tú y más fuerte~~

El rubio se sonrojó levemente esperando que el otro le diera por bajarlo y miró a Sora (Nero) como buscando aun que le explicará varias cosas.

-¿Cuándo pasará el efecto? –Trataba de calmarse y palmeo la cabeza de su ahora hermano para que lo bajará, y este lo hizo-

-Dentro de una hora según nos dijo el sombrerero –Suspiro nuevamente cruzándose de brazos.

Por su parte Roxas un no se acostumbraba al hecho de mirar a su hermano y a uno de sus más cercanos amigos en esta situación. Los ojos color cielo de Sora que antes se veían inocentes ahora se ven rudos y los ojos azul profundo del canino ahora se veían alegres y entusiastas.

¿Una hora? No podría ser tan malo, eso se esperaba.

O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O

Ambas personas acompañaron al rubio a comprar los dulces para Sora –El de antes- Una vez afuera, Nero (Sora) aprovecho para meter su mano en la bolsa y sacar una gran paleta de color rojo con rosa y comérsela. Estaba a punto de hacerlo, pero Sora (Nero) se lo quitó rápidamente.

-¡Oye!

-No quiero volver a mi cuerpo y encontrarlo hiperactivo

-¿Te pones hiperactivo? –Decía sin imaginárselo el rubio viendo al castaño-

-Pues sí –Dijo- Imagínate como se pone tu hermano…. Y poténcialo 30 veces por la energía de un perro.

Nada más de solo imaginárselo Roxas le quito la otra paleta que el albino sacó de la bolsa minutos antes de que hablaran. El can formón un puchero con los labios y se quedo quieto.

-Jáh, de seguro hiperactivo serías más divertido –Masculló el otro mirando al castaño quien solo levanto los brazos sin darle mucha importancia.

Roxas seguía impresionado por ese gran cambio.

-¡Neeeeeeeeeeeeeeene! –Hasta que otra voz lo hizo voltearse nuevamente.

Aquella inconfundible voz no era nadie más que la del albino mayor Dante, la pareja de Nero, quien como toda pareja –Al menos está- Se hecho sobre quien creía que era su “nene” y lo beso de una forma apasionada.

Ambos gemelos quedaron en shock por tal escena, menos el albino que no entendía nada y tampoco se movía. Sin embargo ese beso no duró mucho ya que el mayor se separó de este y tomo al can de los brazos.

-Tú no eres mi nene –Qué rápido se dio cuenta-

-Haha no –Parece como si lo otro no le hubiera afectado- Soy Sora, cambiamos de cuerpo por una cosa que nos dio el sombrerero… Por cierto, ¿Eso que sentí fue tu lengua~~?

-A-Aléjate de m-mi h-hermano –Lograba apenas hacerlo audible el rubio porque en parte le aterraba la presencia del mayor.

¿Por qué le aterraba? Sabía que no era mala persona, era solo el hecho de que se intimidaba porque era mucho, mucho, muchiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimo más alto que él.

-¡Ah! Roxas ¿No? ¿Tú sabes lo que está pasando?

-Idiota –Se adelantó a decir el castaño colocándose en frente del mayor- Al menos fíjate en lo que está a tu alrededor

Para Dante le era raro varias cosas: 1- Que su novio ahora fuera castaño. 2- Que lo reprendiera. Porqué al menos con la voz gruesa –Y sexy según Dante- De Nero podría aunque sea tomarse un poquito enserio la reprenda, pero con la voz fina que ahora tenía parecía que hablará con un niño pequeño. 3- Ya estaba acostumbrado a verlo desde abajo, pero con ese cuerpo lo tenía que ver MUCHO más abajo.

-Nene esto es raro –Se agacho para estar a su altura- Y de paso el castaño no te queda… Además de que te ves mucho más niño ahora…

Sora (Nero) bufó mientas con un ademán llamaba a Nero (Sora) el otro se le acercó y también se agacho a su altura, el castaño lo tomo de una oreja y le empieza a susurrar algo.

-¿Seguro? –El otro asintió- ¡Ok~~!

Se acercó al mayor quien ya se había vuelto a erguir, y sin dudarlo golpeo a este en toda la quijada, haciendo que el otro se fuera hacia atrás tomándose de esta.

-Oye… ¡No me dolió la mano! –Sonrió alegremente mirando su puño.

-Que tierno eres –Se soba su quijada- ¿Cuánto durará esto?

-Una hora

-Esperaré…

O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O

-¡Sora, no! Perro malo –Decía el castaño regañando al albino, tratando de sacarle una mariposa que había atrapado con la boca- ¡Dame eso!

Sora (Nero) y Nero (Sora) estaban cerca de la fuente, mientras que Roxas lo vigilaba de cerca y Dante tuvo que irse por una misión. Desde entonces el albino ha estado haciendo cosas que su ahora nueva condición canina le permitía hacer, como correr más rápido –Roxas no lo consiguió atrapar- Olfatear un caramelo a una enorme distancia al igual que escuchar a una niña llorar a esa misma distancia, saltar de un solo intentó a los arboles de ramas un tanto altas y más que todo perseguir cosas.

-¡Ardillas~~! –Se emocionaba tanto con ahora ser perro que está haciendo cosas que hacían al otro mirarlo con reproche.

-Ni se te ocurra –Inquirió el castaño mirándolo.

-Pero debo atraparlas… Y luego enterrarlas –Se arrodillaba tomándolo de la camisa poniendo unos ojos totalmente brillantes, ojitos de perro- Anda, déjame jugar.

-¡Jum! No me acordaba que podía hacer eso –Murmuró para sus adentros- Se que te da esa gana de hacerlo pero debes aguantarlo, no por algo ahora eres semi-humano.

-Jooo…-Se había decepcionado, pero otra cosa llamo su atención y fue rápidamente a buscarlo-

Al regresar, en sus manos tenía una palo de madera de gran diámetro y anchura, Sora (Nero) ya sabía que quería, así que solamente enarcó una ceja.

-¡No Sora!

-Vamos, ponlo de este modo, estaré en tu cuerpo, pero no soy tú… Así que no tienes que arrepentirte, las únicas personas que te conocen de acá somos Roxas, Dante y yo

-Buen punto… -En verdad era buen punto. Tomó aquel palo y lo lanzó con bastante fuerza, o la que ese cuerpo podía darle y vio como el otro salió corriendo por dicho palo. Regresa nuevamente con ese palo en su boca y se arrodilla otra vez frente al castaño.

-Fue divertido~~ –Dijo con eso atravesado en su boca. Sora (Nero) tomó aquel palo nuevamente- ¡Otra vez~~!

-Eres una persona muy especial Sora –Acarició la cabeza del albino y el otro solo sonrió inocentemente.

Roxas reía ligeramente al ver como se comportaba ahora su gemelo, ya llevaba bastante tiempo sin hacer nada, se levantó y camino hasta donde ambos para así poder acariciar a Nero (Sora) tras su oreja.

-¡Pf~~! –Murmuró poniendo una mueca de satisfacción agitando su cola- Se siente…

-Bien, lo sé… -Terminó pro decir el castaño.

-¿Eh? –Ahora esta voz hizo voltear a los tres, Roxas solo pestañeo unas cuantas veces, Nero (Sora) doblo la cabeza a un lado sin entender, y Sora (Nero) gruñó –Aunque el gruñido le salió raro- Ya conocía a esa persona.

Era la mujer que los atendió en una de su cita y se le estaba insinuando a su pareja, obviamente la chica reconoció al albino, pero no en el cuerpo en donde estaba.

-¡Tu!

-¿Yo?

-¡TU! –Exclamó el castaño- ¿Qué mierda crees que haces aquí zorra?

-¿Eh? No sé quién eres pero mi problema no es contigo, es con él.

Maldición, se le había olvidado que no estaba en su cuerpo, debía dar una excusa pero ya.

-Él no puede hablar ahora porque está enfermo de la garganta así que yo hablaré por él –Lo peor fue que la chica se lo creyó y es que no se fijo que el otro dijo “Yo” cuando la vio.

-Niño tonto, ¿Crees que no he olvidado lo de la bandeja? -amenazó al albino-

-¿Y tú crees que yo… Es decir él ha olvidado que te le estabas proponiéndole sexualmente a mí… Digo, su novio como gata en celo?

-¡Eso no le incumbe! –Grito- Además no sé cómo alguien como él se puede fijar en alguien como tú… Debería fijarse en alguien mucho mejor, como yo, nadie se resiste a mis encantos...

Guiñó el ojo y lanzo un beso al rubio el cual solo se estremeció por dicho acto.

-Y si lo hubiera logrado, quizás me hubiera enseñado todo y disfrutado mucho de eso… ¿Qué tal si tiene un gran…

-¡Agh! –Gruñó solo para callará.

-¡Y yo que me lo perdí! –Puso un puchero decepcionada-

-¡¿Qué te pasa?! ¿Acaso vendiste tu cerebro para comprarte una 13° virginidad o te le caíste a tu madre cuando niña?

-Uhm… ¿Cómo sabes que eso lo está diciendo él? –Se cuestiono la muchacha.

-Telepatía –Y la muy tonta se lo creyó.

-¡Pues no es de tú incumbencia lo que haya vendido!

-Perra, acabas de decir que te vendiste para algo… ¿Qué fue? ¿Tu vagina por un plato de cereal?

-¡Ush! –La mujer pataleó como niña pequeña. El castaño alzó el palo de madera que tenía desde que Nero (Sora) lo devolvió, la chica solo lo miro extrañado- ¿Qué harás con eso?

-Yo no, él…. Y lo que él hará será meterte esto por donde la cosa que usa para encantar a los hombres que llevas entre las piernas… ¿Ya lo usaste hoy no? Como hace 10 minutos… La cosa es que te lo meterá lo bastante dentro para que no lo sueltes hasta la menopausia…

La mujer calló ahí por unos minutos, si el canido fue capaz de tirarle una bandeja y una taza hirviendo de chocolate es capaz de hacer más, mucho más, por un simple ataque de celos.

-No necesito de esto para hacer lo que me gusta…

-Mámaselo a alguien más… -Tomo una bocanada de aire- ¡Aléjate de mí… Es decir, su novio!

Y Sora (Nero) le lanzo el palo de madera el cual rompió el puente nasal de la mujer- A pesar de ser con la fuerza del castaño lo logró- Aquella mujer tomo en ambas manos su nariz y fue corriendo a buscar lo que sea que necesitará, dejando un pequeño camino de gotas rojas bajo sus pies.

Roxas estaba totalmente atónito por todo lo que paso, jamás imagino tan explayado léxico salir de los labios de su hermano, aunque ahora no era él pero si su cuerpo, imaginaba más esas palabras de los labios del albino. En cambio, Nero (Sora) no logro entender ni la mitad de las palabras que decía el otro, que bueno era ser despistado en este caso.

-¿Qué significa…

-No repitas NADA de lo que escuchaste ¿Ok? –Sobre protectoramente le decía Roxas al albino.

Unos cuantos minutos quedaron todos en silencio, el cual le extraño al rubio. El castaño dio vuelta para mirar a Roxas, y el otro lo miraba como esperando un comentario mordaz de él, pero en vez de eso...

-¡Roxy~~!–Se le echo encima, cayendo de lleno al suelo con el castaño encima.

-¿Qué…?

-¡Al fin! –Levantó los brazos el tercero, dirigiéndose a la fuente para ver su reflejo en el agua- Soy yo otra vez…

-Sora… -Palmo la cabeza de su hermano, y este se levantó, tomando a Roxas para ayudarle a levantarse de igual forma.

-No me arrepiento de lo que dije, pero la-men-to haberlo hecho con la voz tuya, Sora…

-No importa… -Llevo sus manos a la espalda sonriendo amablemente.

Y en ese momento el albino mayor volvió a hacer su aparición a un lado del menor.

-Oye, ¿Ya paso una hora? Porque creo que mi reloj esta algo atra… -No terminó de concluir porque el canido se le echo encima y comenzó a besarlo de la misma forma que lo había hecho el otro al principio.

Y claro que Dante no perdío el momento para hacerlo.

-Oye Roxy…

-Dime

Sora volteó a ver a los tortolos ocupados en los suyo, y luego volvió a Roxas con un extraño brillo en sus ojos.

-¡Enséñame como besar con lengua! –Y esto iba enserio.

Mala elección de palabras. Y pésima pregunta para esa persona.

-…………….. ¿No quieres un helado?

-¡Ok~~!