Hacer travesuras es malo sólo cuando te descubren. [Ky & Charlie~]

Hoy en día, podría decirse que el Reino de Diamantes se encontraba “tranquilo”. De clima fresco y agradable, perfecto para hablar con las revoltosas flores. Había casi un sinfín de flores en el jardín y las mayoría eran de varios tonos de amarillo, aunque se podía apreciar algunas que otras rosas rojas por el lugar de todas formas el color rojo no es muy bien visto por acá y más en el castillo mismo. Me agaché levemente doblando las rodillas para ver a pequeños lirios que me saludaban moviendo sus botones de lado a lado, una pequeña sonrisa me sacó aquella linda acción.

Hasta que…

-¡SU ALTEZAAAAAA! –No tenía que pensarlo mucho, esa chillona voz era la de una rosa.

En un suspiro me volví a erguir caminando serenamente hacía donde provenía la chillona voz de la rosa hasta llegar a la que podría llamarse “escena del crimen”. Como no suponerlo, la rosa tenía apuntado a Arthur que no parecía complacido con lo que ahora pasaría.

-¡Alteza, alteza! Él….

-Sí, ya lo sé –Mencioné levantando la mano a la rosa y está se quedó quieta, pero frotando sus hojitas de forma perversa esperando a ver qué sucedía con el príncipe de amarillo frente a la reina de amarillo. Me acerqué a Arthur ya estando frente a él tuve que alzar un poco el mentón para verlo puesto que es ligeramente más alto que yo y cruzar mis brazos bajo mi pecho.

-¡Te hemos dicho miles de veces que dejes de fastidiar a los guardias! –“Hemos" No solo yo lo hacía, aunque si en la mayoría del tiempo- ¡Miles de veces te hemos impuesto castigo, te hemos dejado al cargo de “niñeros” y siempre sigues con lo mismo!

Y ya estaba cansada de tener que golpearlo –Nada fuerte obviamente- Por sus absurdas jugarretas. Arthur era enserio el tipo de príncipe malcriado que tanto me enseñaron cuando me educaban para ser reina. Solté otro suspiro deshaciéndome del crucé de brazos ahora llevando mis manos a mi cintura.

-Se que solo existe una persona que puede afrontar tal especial caso –Viré el rostro para otra dirección, mirando específicamente hacía la entrada del jardín- ¡Ky!

Silencio.

-¿… Ky?

Silencio nuevamente. ¿Dónde estaba? Hace rato lo había visto por el jardín… ¿O fue que confundí a alguien más con él?

-¡KY VEN AQUÍ! –Y dicho grito hizo eco por casi todo el jardín y podría decirse que de él castillo- De cualquier modo, si él no viene Necro puede también en estos casos…

La mencionada “Ala” se mueve riendo ligeramente en forma sepulcral retumbando en todo el lugar.

-Tic-Tac, tic-tac… El tiempo corre niño, y tu salvador aun no llega –Mencionaba el ala negra riendo ligeramente pero aun de esa forma sepulcral que retumbaba en el jardín.

Ciertamente, la forma de castigo de Necro era muy…. Bueno para alguien como Arthur ha de ser todo un tormento. Moví ligeramente el hombro para hacerlo callar a lo que respondió a ese movimiento con un resoplido para nada amigable volviéndose a colocar en la posición de antes y “dormir” cosa que hacen la mayoría del tiempo. ¿Charl...? Lo miré con los ojos entrecerrados, sabía perfectamente como odiaba que me llamaran por ese sobrenombre tonto, o iba a hacer nada simplemente me quedaría a ver como Ky se la arreglaba con su hermanito.

Al momento el héroe –O verdugo- De Arthur apareció con su típica calma y serenidad de siempre hacía ambos. La rosa roja seguía riéndose de toda la escena, divertido para la pequeña flor pero por la mirada de Arthur de seguro la pobre terminaría siendo abono tarde o temprano.

-De nuevo, Arthur está fastidiando a los guardias cosa que ya no “debería hacer” –Suspiré resignada girando los ojos- Mejor, arreglen ustedes ese problema….

Me di media vuelta y me encaminé por el jardín, pero antes giré el rostro para ver a Arthur y luego a la flor que ahora tendría la primera plana de cómo Ky regaña a su hermano.

-No le hagas nada a esa rosa –Mencioné apuntándola, y dicho parlamente iba para el bicolor en particular- Y los espero a los dos en el jardín principal…

Sin más me retire del lugar hacía el jardín principal del castillo, anteriormente le había encomendado a un sirviente real que preparará una mesa bien adornada para tomar el té en compañía de mi esposo y mi malcriado cuñado.

Tal como lo pedí, una mesa revestida con un suave y delicado mantel color blanco con bordados alrededor de esta cuyas imágenes eran nada más ni nada menos que los Diamantes. En medio un hermoso florero con flores de un tono amarillo pálido además del inseparable juego de té y una canasta con panecillos que se notaban recién horneados.

Sin duda alguna los sirvientes son bastantes eficaces. Después de que me reverenciaron, tome asiento y tomaba un panecillo al cual le di un ligero mordisco. A parte del pequeño percance del bicromo, todo seguía tan tranquilo como debe ser el resto del día.

Pero en Wonderland nada es tan tranquilo como lo parece.

Ya llevaba mi cuarto panecillo cuando Ky se apareció tomando su asiento frente a mí como siempre y minutos después apareció un muy veloz y vanidoso Arthur con el cabello erizado producto del típico castigo que el rubio mayor le hace al menor usando un poco de su magia estática. Una vez sentado todo un sirviente de tez pálida y cabello castaño oscuro apareció para servirnos a todos el té y luego retirarse, pero no tan lejos por si lo volvíamos a necesitar.

-El rojo no le hace mal a nadie -Mencioné al haber escuchado la pregunta y el comentario del menor sobre la flor. Seguramente Ky refutaría diciendo algo sobre el reino carmín y su no muy ajustada armada.

Alejándonos de eso, estábamos la familia real reunida como todo los días, bueno casi completa, faltaba alguien esencial. ¿Donde estaba Bleith? No se me hacía raro esa actitud de desaparecido de su parte pero en verdad quería disfrutar de unos días tan tranquilos como este con mi familia completa.

-Supongo que hoy nuevamente no tendremos a Bleith, es una lástima -Murmuré dándole un sorbo al té con desdén. En ese momento Undine y Necro volvieron a despertarse, la ala blanca tomó la canasta de panecillos y sin tan siquiera aminorarlo la lanzó contra la ala negra quien gruño de una manera no muy grata cuando la canasta impacto contra él, ya sabía lo que significaba: Problemas, no entiendo como la que dice ser "El espíritu de la vida" fuera tan buscapleitos.

-¡Duérmanse ya! -En tono severo les hablé y está se detuvieron antes de que comenzarán un verdadero caos, pero antes de que volvieran a u posición normal Undine le sacó la lengua a Necro y este volvió a gruñir señalándola con el puño.

El sirviente que se anticipo ante todo fue rápido a dentro del castillo y al momento salió con una nueva canasta de panecillos y ahora con una bandeja de galletas de nuez que dejó sobre la mesa, otra sirviente de cabello naranja y pecas en su rostro apareció con una escoba para recoger los panecillos tirados al suelo.

-Hoy ha sido un día bastante tranquilo -Tomé una de las galletas de nuez la cual remojé en el té y luego la mordí- Salvó por lo de Arthur, no ha ocurrido nada más...

Sin embargo no tenía que haber dicho eso tan rápido, porqué rápidamente otro sirviente de hebras oscuras y con lentes redondos se había aparecido a toda velocidad cargando un rollo en su mano derecha y respiraba muy agitado.

-S-Su m-majestad C-Charlotte...

-Primero respira, luego me dices -No tenía que mirarlo para decirle eso. El chico respiró hondo y luego abrió el rollo.

-El alto consejo requiere de su presencia para una reunión respecto a la economía actual del Reino de Diamantes

¿De nuevo? Ya era la tercera vez que tenía esa reunión sobre la economía del reino amarillo. Suspiré hondo y miré de reojo al sirviente.

-Dile que después de la merienda iré....

-¡P-Pero...

-¡Después! -Lo vi ahora completamente y este solo brincó ligeramente del susto y fue rápidamente hacia el alto consejo.

Reuniones, reuniones y más reuniones por la economía del reino de Diamantes, y simplemente debía llegar ahí en medio de esa enorme mesa redonda decir "La economía sigue estable y los impuesto no serán aumentados" Argumentar con los ancianos del consejo de que deberían aumentarse por X razón, indagar que es mi decisión y potestad como soberana y no más de eso. Normalmente esas clase de cosas eran mis responsabilidades.

Aun a pesar de estar agradecida por haber sido coronada reina de Diamantes extrañó mis tiempos de niña, aunque recordarlos tampoco era grato porqué la mayoría de mi infancia me la pasé tras grandes libros y rollos para aprender a ser "Reina". En verdad no debía haber sido tan fuerte con el pobre chico que solo quería traerme una información que unos viejos le mandaron a hacer, si vuelvo a ver ese chico me disculparé como debe ser.

-Perdóname Ky -Mencioné bajando el semblante y cerrando los ojos, dando un pequeño pero largo suspiro- Últimamente, han sucedido muchas cosas y los del alto consejo solo quieren que le de el permiso de hacer lo que quieran.

A pesar de ser como se menciona: "El alto consejo del reino de Diamantes" Mi palabra sigue siendo ley ante ellos, y no puedo seguir dejando que manejen la situación como quieran y cuando le convenga, pero eso era cuando no había reyes, ahora estaba Ky y yo al mando ya no tenía porqué seguir así.

Sentí las manos de Ky tomar las mías y sonreí con simpleza cuando deposito un beso en una de ellas, entonces mi sonrisa se ensanchó cuando el menor puso una cara de disgusto.

-Toma eso como un castigo querido~~ -En tono de malicia se lo había dicho, aún así pasé la yema de mis dedos sobre la mejilla del rubio mayor- Pero bueno, este momento es para disfrutar

Como si él no lo supiese con respecto a los deberes militares. Claro tampoco se trataba de ver quien estaba bajo más presión o tenía más deberes pues últimamente la relación entre diamantes y corazones parecía ser más “hostil”. Por el rabillo del ojo observó a su hermano menor.

-Tan exagerado como siempre- Su sonrisa llena de tranquilidad se amplió al sentir la mano de Charlotte sobre su rostro.

-Entonces, si para él es un castigo ¿Como debería verlo yo?- Bromea. Ky es conocido por ser sumamente serio, sin embargo en ocasiones como esa es la excepción, al menos frente su familia.

-Por cierto Arthur- Dió un ligero sorbo a su té antes de comenzar a hablar, luego simplemente dejo la taza a un lado –Me tome la pequeña libertad de invitar a una de tus “amigas” a tomar la merienda, hace unos días.- Claro, no iba a mencionarle gran cosa al respecto de lo que habían hablado* -Solo te sugiero que tengas un "poco mas de cuidado" los rumores corren más rápido que el fuego, y mas viniendo de las sirvientas-

(OFF: Cortito porque no se me ocurre mucho D: y si kiske habla de aloshka xd)

Rodó los ojos mientras hacía como que vomitaba sobre la taza. La próxima vez definitivamente se guardaría el comentario para si mismo.

Para distraerse (antes de contraer diabetes por culpa de esos dos) comenzó a jugar con la orilla de la taza, pasando su dedo por el contorno mientras apoyaba la cabeza en su otra mano. Dio un vistazo rápido a su casi imperceptible reflejo en el florero, descubriendo con satisfacción que su cabello había vuelto a ser el mismo. Una cosa menos de la que preocuparse.
O eso pensaba.

Dio un respingo cuando Ky llamó su atención, dirigiendo su mirada a su hermano mayor. Frunció el ceño cuando éste le habló de una de sus "amigas". ¿Qué "amigas" exactamente? Porque seguro no sonó como si hablara de <<amigas>> con el significado de la palabra propiamente tal.

Como sea, simplemente se encogió de hombros dejando su propia taza a un lado.
-No se de que me hablas. ¿Rumores? -Rió. -Tu bien sabes que las sirvientas prácticamente viven de eso. -Explicó haciendo aspavientos con la mano. En serio Ky era muy inocente si pensaba que por "andar con más cuidado" disminuían las probabilidades de repentinamente encontrarse dentro de cualquier sucio pero jugoso chisme. Y no es que Arthur no supiera del tema.

-Y bueno, ¿Quién fue? -Preguntó recuperando su taza para darle un sorbo a su té. -La chica a la que invitaste, digo.


Off: Perdón por la mega tardanza, las quiero 8D -huye-

Al menos, entre los tres no había un ambiente tenso o de la misma índole cuando se hablaba de ese tipo de temas. Y hacía mucho énfasis en la palabra ese puesto que de verdad no sabía de lo que estaban hablando; se que las sirvientas se chismean cada cosa que pasa en el castillo, en el pueblo, en las casas de al lado de las suyas, etc; etc. Y sin embargo no todos los chismes caen a mis oídos, primero porqué en su mayoría son rumores sin mucho chiste y por otra parte para no enojar más a Ky, le he llegado con algunos chismes y él... No es de los que se lo toman a bien o mal, depende de que se trate dicha palabrería.

Pero... ¿Esto? De esto si que no me he enterado, pero para nada. ¿De que amiga estaban hablando? ¿Y como es eso de "tener más cuidado"?.

-Oh... -Alcé las manos a la altura de mi pecho a su vez que desviaba la mirada hacia otro lado- No es como si quisiera enterarme de lo que sucede, pueden hablarse con confianza...

De todas formas en algún momento tendría que conocer a esa "amiga" que tanto mencionan. Con una cucharilla agarre un poco de azúcar para luego echarla sobre el té y revolver con la misma.

-Entonces Arthur... -Di un sorbo a mi té y luego miré a Arthur-... ¿Donde y cuando la conociste?

Típica conversación de "mujer".